JUEGOS

No se acaba hasta que se acaba

Isaac Silguero Matheus | 20 de mayo de 2022

Fotos: Roberto Santos

Si hay una frase en el béisbol que ha trascendido en el tiempo y que cada vez tiene más vigencia es aquella pronunciada por Yogi Berra hace más de 60 años, “El juego no se acaba hasta que se acaba”.

Esa capacidad de no darse por vencidos fue lo que le dio la victoria a Centauros de La Guaira su segunda victoria de la temporada, al dejar en el terreno a Caciques del Distrito 6x5 y de esta forma cortar la racha negativa de tres duelos.

Como ha sido costumbre por los litoralenses, el pitcheo abridor estuvo a la altura. En esta ocasión fue Osmer Morales quien repitió la buena labor de que han tenidos sus antecesores. El diestro lanzó por espacio de cinco entradas en las que abanicó a seis rivales y permitió solo tres imparables.

“Traté de mantener bajos los pitcheos ya que es un equipo que hace bastantes swings. Gracias a Dios se obtuvo el resultado que es lo importante. Esto tenía que pasar porque no hemos estado jugando mala pelota. Seguiremos trabajando para conseguir los resultados positivos”, declaró a nuestro departamento de prensa el escopetero.

El nativo de Villa de Cura recibió apoyo de la toletería. En el segundo capítulo, abriendo inning y al primer lanzamiento, Andrés Regnault disparó cuadrangular en línea por el jardín izquierdo. Dicho batazo de vuelta completa fue el primero en la historia de la franquicia.

“Venía hablando con Cheo (Malavé), me dijo cómo estaba trabajando el lanzador, me tiró el lanzamiento que estaba esperando y gracias a Dios salió el batazo”, dijo Regnault, quien además agradeció a Mike Rojas por darle la oportunidad de ser el cuarto bate e inicialista de hoy.

“Me dijo que tomara rollings en primera y que estuviera ready para cualquier situación y fue lo que hice. Aprovecharé cada oportunidad al 100%”, atizó.

La segunda rayita llegó en el cierre del tercero, luego de un pelotazo a Miguel Gómez con las bases llenas.

Porfirio López se mantuvo en el montículo por Caciques hasta el quinto capítulo, llevando a cabo una buena presentación a pesar de recibir dos carreras.

El duelo del pitcheo estaba presente, hasta que en el octavo los del Distrito aprovecharon un rally, con dos sencillos impulsores de una cada uno y posterior jonrón de Manuel Meléndez con tres a bordo para poner la pizarra 5-2.

Ismael Guillón retiró el noveno sin complicaciones para que, en el cierre del mismo, los bates mitológicos bucarán la remontada.

Ante los lanzamientos de Luis Cedeño se empezó a tejer la heroica. Greifer Andrade se embasó por error del primero base, Luis Villegas recibió pelotazo y Carlos Durán dio hit al LF para llenar las bases; Carlos Colmenares entró como emergente e impulsó la tercera con sencillo al jardín derecho.

Seguidamente, José Duarte y Wuilman Velásquez negociaron boletos con las bases congestionadas, este último ante Víctor Larez, para igualar la pizarra nuevamente y dejar la mesa servida para Adrián Valerio quien le puso punto final al compromiso con sólido batazo a la pradera derecha para remolcar a Julio Creazzola.

“Yo dije que sería mi momento. No había tenido una buena noche, pero busqué el pitcheo y pude conectar sólido. Algo me decía que el turno me llegaría y así pasó”, precisó el dominicano.

Se cortó la seguidilla de caídas, los brazos abridores siguen respondiendo y los bates despertaron. Buenos síntomas para afrontar los tres choques que se vienen esta semana.

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