JUEGOS

Víctor Gárate: Más que manager, un competidor incansable

El estratega  de Senadores de Caracas disputa su tercera final en cuatro años de Liga Mayor y su ilusión de ser campeón está más viva que nunca 

19/07/2024
Yelimar Requena | Prensa LMBP 
Foto: Prensa LMBP

Después del retiro como jugador activo el instinto de muchos es mantenerse cerca del deporte que por años fue su día a día. Pero no todos tienen las habilidades para cumplir ese deseo y chocan estrepitosamente con la obligación de desconectar los sentimientos y trabajar a puro razonamiento. Se necesita carácter y mucha inteligencia emocional. Víctor Gárate es uno de los ejemplos de éxito más recientes. 

El otrora lanzador, que protagonizó inolvidables momentos en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), principalmente con Leones del Caracas entre 2006 y 2017, ha explorado distintos roles, técnicos y gerenciales, en muy poco tiempo y -a decir verdad- ha tenido éxito en casi todos.  

Confió en Liga Mayor de Beisbol Profesional (LMBP) desde su nacimiento, en 2021, asumiendo la responsabilidad de ser el manager de Senadores de Caracas, un rol que había comenzado a explorar par de años atrás en el invierno con Leones, primero como interino en sustitución de Harry Guanchez (2020) y ya luego desde el día uno de la campaña 2020-2021. 

“Esta es una liga que necesitamos hace mucho, a mi como pelotero activo me hubiese gustado tenerla, poder mantenerme en casa quizás me habría ayudado a tener una carrera un poco más larga”, analizó Gárate, en una de sus primeras entrevistas como piloto del Senado, sin tener siquiera idea de lo que iba a lograr. 

Para entonces ya era un estratega, menos emocional, pero igualmente cercano a sus peloteros, con los límites perfectamente dibujados y los objetivos claros. Senadores se convirtió en el primer campeón del naciente circuito y aquello fue solo el prólogo de una historia brillante, a la que quizás pocos le han puesto atención. 

En 2022, Gárate fue bicampeón de la Liga Mayor, hasta ahora el único en lograrlo, y fue campeón también el invierno, en el que trabajó como asesor a la Gerencia de unos Leones del Caracas que ponían fin a una sequía de 12 años sin títulos. Al año siguiente continuó al mando del Senado y fue oficializado como Gerente Deportivo de los melenudos, es posible que en ninguno de los dos circuitos haya conseguidos los objetivos trazados, pero no se detuvo, no ha parado. 

El también ex lanzador de Tigres de Aragua y Águilas del Zulia, está ahora mismo disputando una nueva final de la Liga Mayor, la tercera en cuatro años. Y, claro, su comprensión del juego -como una competencia más allá de los nueve innings- es completamente distinta, pero la esencia es la misma. 

Sigue tan enamorado del beisbol como cuando lo comenzó a jugar, con cinco años en un equipo de nombre “Veteranitos”, sigue siendo un hombre de fe, que valora el concepto de familia y lo ha sabido trasladar al terreno para que sus peloteros le respondan como espera. 

“En Senadores somos una gran familia… La confianza que tengo con los peloteros es clave, la confianza que tienen ellos con los coaches también, en este clubhouse siempre todos estamos unidos, nos la pasamos conversando, hablando de los juegos, de lo que nos hace falta para el dia siguiente y de cómo podemos superar los siguientes retos”, comentó el piloto, insistiendo en que el respeto es la base de todo su trabajo. 

“Ellos (los peloteros) saben que todos queremos ganar, si les decimos algo particular es por el bien del equipo, no hay espacio para ego, todos estamos en constante aprendizaje y eso nos ha ayudado a hacer la diferencia”, agregó el maracayero. 

Verse de nuevo en postemporada lo complace, pero por supuesto no se conforma con eso. A su mando tiene un equipo que fue la mejor ofensiva de la ronda regular y terminó bateando para .325 con 484 hits, 141 de ellos extrabases, y 300 carreras anotadas. Tiene defensores probados, de mucha experiencia, y unos cuantos pitchers que han ido de menos a más y lo han ayudado a trascender. 

Su objetivo real es el título y no por cliché, no por apegarse a la declaración recurrente de todos los dirigentes, sino porque sabe que tiene todo lo que se necesita para alzar de nuevo el trofeo. 

“Este equipo ha jugado muy buena pelota durante toda la temporada, la ofensiva ha estado en su tono, en ronda regular, en los playoffs, siempre se pudo batear y hacer muchas carreras… En el pitcheo hemos tenido altas y bajas, pero hemos salido bien parados de cada reto, tenemos buena defensa ahora mismo. Somos un equipo completo”, sostuvo el estratega, que además está convencido de que los suyos ganan en cualquier parque. 

“Este equipo nos ha acostumbrado a jugar muy bien en casa, juega bastante cómodo en el Universitario, pero en Maracay también tuvimos un buen récord, jugamos muy bien ante Líderes y Samanes. No me preocupa tener que ir allá, solo pienso en hacer un buen juego y sé que -a partir de ahí- los resultados se darán”, insistió. 

Las claves para vencer a su rival inmediato las tiene claras: “mantener esos bates apagados y evitar errores que hagan daño”. El resto se lo deja al béisbol.
 

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